La oración por las ánimas del purgatorio es, como varios santos atestiguan, sumamente efectiva para alcanzar las gracias que necesitamos, porque no solo nos vale la intercesión de cientos de almas a nuestro favor, sino que además es una práctica altamente premiada y alentada por Dios. Este triduo busca ser una forma breve de pedir la ayuda de la Iglesia Purgante para necesidades urgentes o importantes que tengamos.

Vi al Ángel de la Guarda que me ordenó seguirlo. En un momento me encontré en un lugar nebuloso, lleno de fuego y había allí una multitud de almas sufrientes. Estas almas estaban orando con gran fervor, pero sin eficacia para ellas mismas, solo nosotros podemos ayudarlas. Las llamas que las quemaban, a mí no me tocaban. Mi Ángel de la Guarda no me abandonó ni por un solo momento. Pregunté a estas almas ¿Cuál era su mayor tormento? Y me contestaron unánimemente que su mayor tormento era la añoranza de Dios.  -Santa Faustina Kowalska

Parroquia San Antonio de Padua